La norma dispone un sistema de prevención integral para casos de muerte súbita en espacios
públicos y privados de acceso público. Establece la obligatoriedad de que se instalen dispositivos
DEA (desfibrilador externo automático) para asistir en caso de que cualquier persona sufra un paro
cardíaco súbito.
Además, incentiva a que se capacite a la población en las maniobras de
Reanimación Cardio Pulmonar (RCP) de manera masiva, incluso a través de los medios de
comunicación.
Los dispositivos DEA son portátiles y permiten que se diagnostique y -potencialmente- se revierta
un paro cardíaco para restablecer el ritmo cardíaco. Son muy fáciles de usar y pueden ser de gran
ayuda hasta la llegada del servicio de emergencia médico.
A su vez, la RCP es una técnica manual, que puede mantener la circulación de sangre oxigenada
hacia el cerebro y otros órganos hasta que el servicio de emergencia médica asista a la víctima y
pueda restablecer el ritmo cardíaco normal.
En relación a esto, Emergencias, la empresa más importante del país en atención pre y post
hospitalaria, acompaña la reglamentación de la llamada Ley de Muerte Súbita, disposición que
oficializaron hoy la ministra de Salud, Carla Vizotti, y el ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel
Filmus.
También tiene un fuerte compromiso con la asistencia médica en casos de urgencia, y a través
de la Fundación Emergencias todos los años se capacitan a más de 6 mil personas e instituciones en
técnicas básica de Reanimación Cardio Pulmonar (RCP), uso del DEA y primeros auxilios.
“La reglamentación de la ley es un gran beneficio para toda la sociedad, dando un paso importante
para asistir a quienes sufran un ataque cardiorrespiratorio en cualquier lugar. Estamos convencidos
de que Saber Salva, y de que junto al compromiso de toda la comunidad, la sociedad civil, las
demás compañías y el Estado, este tipo de normas pueden ayudar a cuidar la salud de todas las
personas”, apuntó el Dr. Silvio Aguilera, presidente de la Fundación Emergencias.